Miley
se sentó tranquilamente, dejándose calar por aquella sensación de que todo era
perfecto. Sus padres no estaban allí, pero, no obstante, seguía siendo la mejor
Navidad de toda su vida.
El
reverendo había anunciado su próxima boda con Nick en la ceremonia de la mañana
y el director de la escuela la había mirado con alivio. Miley sonrió.
— ¿Qué
te parece tan divertido, cielo?
Nick
entró en la habitación con su padre, que llevaba una videocámara. Denise estaba
justo detrás de ellos.
Se
habían puesto morados cenando y era la hora de abrir los regalos. Después de la
misa, aquél era el momento favorito de Miley.
—Me
estaba acordando de la cara que puso el director cuando anunciaron nuestra
boda.
—Así
no tendrá que volver a hablar contigo, ¿verdad?
—Esto…
Nick
se sentó a su lado en el sofá y le rodeó los hombros con el brazo, apretándola
contra su cuerpo.
— ¿Lista
para abrir tus regalos? —le susurró al oído.
Ella
se estremeció al sentir su aliento.
—Tal
vez uno de ellos venga empaquetado en unos pantalones vaqueros, una camisa de franela
roja y unas botas —dijo describiendo el atuendo de Nick.
Él
la besó en la frente.
—Todavía
no, querida, pero muy pronto.
Ella
fingió decepción, aunque en realidad estaba emocionada pensando en la noche de
bodas. Nick se había negado a volver a hacerle el amor hasta que estuviesen
casados. Ella no le había llevado la contraria, sobre todo porque Nick le había
dicho que en la ducha lo habían hecho sin protección, y que quería que sus
hijos fuesen engendrados dentro del matrimonio.
En
ese momento sonó el timbre y Denise salió de la habitación para ir a abrir. Miley
se preguntó quién sería cuando oyó una voz que le era muy familiar en la
entrada.
—Hace
un frío helador ahí fuera.
Miley
se quedó paralizada al ver a sus padres entrar en el salón de Nick.
—Habéis
venido.
—Por
supuesto que hemos venido —dijo su padre—. Es Navidad.
—Sí
—era Navidad y sus padres habían ido a pasarla con ella. Miley sonrió—. Me
alegro mucho.
Su
madre también sonrió, pero fue su padre quien se acercó hasta el sofá y la
levantó de un abrazo.
—Estamos
encantados de verte, Miley.
Su
padre la tenía agarrada con tanta fuerza que Miley casi no podía ni respirar.
Entonces, le susurró dos palabras al oído que nunca habría esperado escuchar:
—Lo
siento.
El
dolor de toda una vida no podría aliviarse sólo con un abrazo, pero se mitigó
bastante. Su madre también la abrazó.
Miley
miró a Nick.
—¿Sabías
que iban a venir?
Él
asintió y algo en su mirada le dijo a Miley que tenía que ver con ello. Nick le
había contado que los padres de ambos habían intentado emparejarlos y ella se
había sentido menos dolida al enterarse de que su padre le había vendido el
rancho a Nick para preparar el camino hacia el altar.
Miley
sonrió a Nick y movió los labios para que sólo él los leyera:
—Te
quiero.
Él
la abrazó.
—Yo
también te quiero, cielo.
Miley
suspiró y se acurrucó contra él.
Se
casaron el día de Año Nuevo. La iglesia brillaba bajo el sol invernal, como un
faro, cuando Nick entró por la puerta lateral.
Estaba
nervioso. Miley iba a convertirse en su esposa. Escuchó la algarabía y supuso
que la mayor parte de Sunshine Springs se había acercado a presenciar la
ceremonia.
Se
hizo el silencio y el reverendo le indicó que ocupase su lugar. Nick miró hacia
los bancos, llenos de gente, y sonrió a sus invitados. Victoria y Avan estaban
sentados juntos, con las manos entrelazadas. Sus padres estaban en el primer
banco de la derecha y los de Miley al otro lado del pasillo.
Nick
sonrió recordando la emoción de Miley al ver llegar a sus padres. Había llorado
entonces y había llorado también cuando él le había regalado el anillo de
compromiso. Para una mujer que casi nunca lloraba, los últimos días habían sido
muy movidos. Se preguntó si también lloraría durante la ceremonia.
Empezó
a sonar la Marcha Nupcial y Nick miró
hacia la otra punta de la iglesia. Los invitados se pusieron en pie y vio
aparecer a Miley, que iba vestida con el vestido de novia de su abuela, que le
quedaba a la perfección. A Nick se le encogió el corazón al verla y sintió que
deseaba tocarla con todas sus fuerzas. Ella le sonrió y supo que la felicidad
que irradiaban esos ojos debía de reflejarse en los suyos propios.
Miley
llegó a su lado y el reverendo le indicó a Nick que le diese la mano. Nick hizo
sus votos con seguridad, mirándola a los ojos.
—Sí,
quiero —dijo con fuerza, como si llevase toda su vida practicándolo. Así se
sentía.
De
pronto se oyó un grito. Nick y Miley se volvieron a ver qué ocurría. Delta
estaba subida a un banco al fondo de la iglesia.
—¡Ratones!
Nick
refunfuñó. Miley rió y un niño que parecía incómodo con su traje de los
domingos apareció en el pasillo central.
—No
es un ratón. Es mi hámster, aunque antes era de la señorita Cyrus. Él también
quería venir a la boda.
Gritos
de sorpresa lo siguieron. Y unos minutos después toda la iglesia era un caos.
Toda, salvo los primeros bancos. Los padres de Miley y de Nick permanecieron
sentados.
—Estamos
acostumbrados a este tipo de cosas —dijeron con resignación los padres de Miley
al reverendo—, es nuestra hija.
Nick
sonrió.
—Continúe
—le pidió.
—¿Están
seguros? ¿No sería mejor esperar a que encontrasen el ratón?
Miley
sacudió la cabeza.
—No
es un ratón. Es Bud, y ya lo
encontrarán. Continúe, por favor.
Nick
esperó que lo encontrasen antes de que se metiese entre las paredes y se
comiese los cables.
El
reverendo leyó los votos a Miley. Cuando le tocó hablar, respiró profundamente.
Los ojos se le llenaron de lágrimas y la voz le tembló de emoción.
Avan
gritó detrás de Nick.
—¡Lo
tengo!
Nick
se volvió y vio una pequeña cabeza peluda asomando en la mano de Avan. Le
parecía justo que Bud hubiese
presenciado su boda. Al fin y al cabo, gracias a él Nick se había dado cuenta
de lo que sentía por Miley.
Se
volvió hacia su esposa. Su esposa. Qué bien sonaba aquello. Y era evidente por
su mirada que Miley pensaba lo mismo. Se sonrieron y miraron al sacerdote, que
murmuraba que aquello era inadmisible. La multitud se calmó y el sacerdote pudo
terminar la ceremonia, dándole permiso a Nick para que besase a la novia.
Él
se agachó y besó a Miley en los labios, sellando con aquel beso su futuro y su
amor.
Fin
oowwwww siiiss de mi corazoon super liindooo el final encerio te amoo muxiio babyy recuerdalo siempre y pase lo q pase siempre contiigoo live loveee
ResponderEliminarQE LIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIINDO! xdd aww ame el final!! fantasticooo :D me encanto la nove felicitaciones
ResponderEliminarme encanto ♥
ResponderEliminarbello final
bella historia
espero suba una nueva pronto ♥
ooooh Mii...!!!
ResponderEliminaraaah lo ameeee!
me encantoooo en serio!!!
aaay la que lloró fui yop! =P
esk en serio se me hizo tan genial! jeje
kuidathe girl!
espero nove! y pues
te kiiierop =D
Awwwwwwwwwwwwwwwwwwwww estuvo hermoso el final!
ResponderEliminarDiscúlpame tanto me desaparecí espero que la hayas paso perfecto.
:)
Es que grrr odio cuando mi compu se malogra bueno en realidad se anda malogrando a cada rato!
u.u
Pero bueno que se le va hacer
Disculpa otra ves y pues esta nove estuvo hermosa haha aunque no estaria mal un extra hahaha!
xD
Buno tu decision ;D
Hhahaha besitos te cuidas y un archi mega super recontra inmenso abrazo de mi parte
xoxoxooxoxoxo
NOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOOO!!!!!!!!!!MI NOVELA FAVORITA TERMINO *TRAUMA* JAJA HAZ SEGUNDA PARTE PORFIS, DE VERDAD LA AME, ME LA LEÍ COMO EN 4 DÍAS O 6 ♥ ES PRECIOSA !!
ResponderEliminarNO PUDO TERMINAR LA AME TANTO :C
AWW BYE, TE AMO HERMANA MAYOR ♥
(ME LEERÉ OTRA NOVE TUYA!)
wow wow me encanto encantooooooo el final tan lindo los dos alfinal entendieron que se aman ;) Niley Foreverrrrrrrrrrrrrr wiii jajaja te adoro sube pronto nueva nove sorry x coment tarde pero aqui ando jaja ok ya cuidate muchoooo bye
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